"CONSTELACIONES FAMILIARES"

CONSTELACIONES FAMILIARES

Cuando se habla de Psicoterapia Familiar Sistémica se piensa en Bert Hellinger y en su método de las Constelaciones Familiares.

 Helinger estudió Filosofía, Teología, se formó en Psicoerapia Gestalt, en análisis transaccional, en Terapia Familiar Sistémica, con especialidad en Psicoanálisis; y crea su nueva Terapia en Constelaciones Familiares.

Su método es fenomenológico y experimental, esto es, se puede ver, observar, y demostrar. El nombre con el que se define este método ha sido causa de muchas malas interpretaciones, pues se piensa que “Constelaciones” tiene algo que ver con la astrología, con los horóscopos, con la magia, con el trascendentalismo, con el espiritismo, con el esoterismo, etc., nada que ver con todo esto. Se le puso el nombre basándose en las Constelaciones Astronómicas, que es una agrupación ordenada de estrellas, cuya posición en el cielo dan como resultado a lo que conocemos como Orión, Pegaso, Centauro, Hércules y Osa Mayor, entre otras. Adquieren su nombre por el orden o acomodo de las estrellas. Así, Constelaciones Familiares se refiere al orden de cada individuo que integra a toda la Familia y que conforma un Sistema Familiar. Ese orden debe ser inalterado. Esta Terapia de Constelaciones Familiares es auténticamente una ciencia estudiada y demostrable, dentro de la Física Cuántica.

 Al venir a este mundo dentro del seno de una familia, los seres humanos no solo heredamos las características genéticas, los ojos, los rasgos, los temperamentos, las formas de caminar, la complexión corporal, etc., sino también heredamos todo un sistema de creencias y pautas de comportamiento. Nuestra familia es un “sistema”, un clan, una tribu, un campo energético (energía estática=eléctrica), en cuyo interior crecemos y nos desarrollamos. Todos nosotros, desde nuestro nacimiento, ocupamos un lugar único e irrepetible. Ese lugar debe guardarse en un orden, y todo desorden cobrará consecuencias que implican no solo a nivel personal, sino generacional, esto es, de generación en generación se puede ir arrastrando implicaciones que manifiestan como síntoma exterior un “atore” en la felicidad, el éxito, la salud y el amor. A esto se le conoce como “lealtades sistémicas” que generan el no fluir en la vida. ¿Quiénes conforman nuestro Sistema Familiar? No sólo la familia directa e inmediata, como son los padres, la pareja y los hijos, sino todos los que hicieron posible, de generación en generación, mi presencia y existencia en este mundo, a los que llamamos ancestros, o sea, mis tatarabuelos, mis abuelos, mis tíos, mis padres, las posibles parejas previas de estos, hasta llegar a mí y a los míos. ¿Cómo se realiza una Constelación Familiar? El Constelador podrá abrir el sistema del cliente que ha solicitado poder constelar algún tema en específico que le inquieta, ayudándose ya sea con muñecos, con recuadros de foamy o con representantes que voluntariamente son escogidos para dicho trabajo. ¿Cómo se adquiere toda la información que se muestra? A través de los “Campos Morfogénicos”. Rupert Sheldrake es un bioquímico británico que descubrió dentro de la biología contemporánea, la resonancia mórfica o morfogénica: las mentes de todos los individuos de una misma especie –incluido el hombre- se encuentran unidos, formando una sola unidad dentro de nuestro planeta. Este campo afectaría a las mentes de los individuos y las mentes de estos también afectarían al campo. Cada especie (vegetal, mineral o animal), posee una memoria colectiva a la que contribuyen todos los miembros de la misma especie y a la cual conforman. ¿cómo podríamos entender las migraciones de mariposas o aves: Una es la generación que sale de un punto de partida, otra generación hace el recorrido y, finalmente es otra generación, totalmente distinta de las dos anteriores, la que llega a su destino, y este ciclo se repite de generación en generación una y otra vez? Se le llama memoria trasgeneracional o memoria común compartida por todos los miembros del mismo clan, hayan o no convivido en el mismo tiempo y espacio. Esto explica por qué los secretos y los no dichos

 de una generación ejercen ese tremendo efecto tóxico en las siguientes generaciones. ¿Para qué sirve una Constelación Familiar? Primero y sobre todo, para descubrir el orden en el que se encuentra todo el sistema familiar y detectar posibles “lealtades invisibles” que estén “atorando” a la fluidez del individuo.                                                                   Pbro. Mtro. Raúl Zarazúa Sánchez